Iniciar Sesion
Crear Cuenta

La Profecía del Periódico

Escuchar audio relato

La mañana comenzó con un presentimiento sombrío. Me subí al autobús con la rutina de siempre, pero algo me hizo sentir que ese día sería diferente. Me senté en un asiento vacío cerca de la ventana y saqué el periódico para pasar el tiempo durante el trayecto.

Mientras leía las noticias, una sensación de familiaridad me invadió. Los titulares parecían hablar directamente a mí, como si alguien hubiera estado escuchando mis pensamientos más íntimos. La primera noticia hablaba de un incendio en un edificio cercano a mi casa, y mi corazón se detuvo cuando vi la dirección exacta de mi apartamento. Mi teléfono vibró con un mensaje de mi vecino, confirmando que mi edificio estaba en llamas.

Intenté convencerme de que era una coincidencia, pero la siguiente noticia me heló la sangre. Un artículo detallaba un asalto en una tienda cercana a mi trabajo, y mi jefe me llamó justo en ese momento para informarme de que la tienda había sido asaltada esa mañana. El miedo comenzó a crecer en mi pecho.

Seguí leyendo, y cada noticia parecía estar conectada a mi vida de alguna manera. Una noticia hablaba de un accidente de tráfico en la ruta que tomaba para ir al trabajo, y mi teléfono vibró con un mensaje de mi amigo, quien había estado en el accidente. Cada palabra que leía se manifestaba en mi realidad, y el terror comenzó a envolverme.

Mi búsqueda de respuestas solo me llevó a un laberinto de terror. Las imágenes en el periódico parecían multiplicarse, cada una mostrándome en situaciones cada vez más aterradoras. Y en cada una de ellas, el hombre con la mirada intensa estaba allí, observándome con una sonrisa macabra.

La última imagen me dejó sin aliento. Me vi solo en la plataforma del autobús, con la sombra oscura de un vehículo que se acercaba a toda velocidad, como si la muerte misma estuviera a punto de alcanzarme.

En ese instante, el tiempo se detuvo. La realidad se desmoronó, donde el autobús, el periódico y las noticias se fusionaron en una pesadilla inescapable. El hombre que se manifestaba en las imágenes del periódico, se inclinó hacia mí, su sonrisa creciendo en una mueca siniestra. Y yo, paralizado por el miedo, solo podía esperar, atrapado en una pesadilla de la que no podía escapar.

¡Fin!

¿Te gustó este relato? ¡Vota por él y ayúdalo a convertirse en la historia de terror más votada del sitio!.

21
0
Guardar
Agregar a lista