Mi pareja perdió su trabajo debido a la pandemia, como muchas otras personas. Después de buscar mucho, encontró uno donde el salario no era alto, pero era suficiente para sobrevivir, ya que vivía solo en su casa. Después de dos semanas, se encontró con un ex compañero de trabajo que le dijo que iba a hablar con los jefes para que lo recontrataran, ya que no había dejado una mala impresión. Y así fue, poco después lo llamaron para que llevara sus papeles. Después de un mes de estar trabajando, lo citaron a una reunión donde le ofrecieron ser supervisor en una nueva planta que abrirían.
Cuando ya era supervisor, me propuso que fuera a trabajar con él. Con mis estudios, podría tener un buen puesto y ganar más que en mi trabajo actual. Al principio no quería, pero terminé aceptando, ya que estaba estudiando y los costos de la mensualidad y los materiales eran bastante altos.
El ambiente laboral era algo que nunca antes había experimentado: chismes, estrés, envidia, etc. Pero yo no era muy sociable, además de que no me sentía cómodo en ese entorno. Trataba de ignorar a la gente. Con el tiempo, terminamos viviendo juntos.
Con el tiempo, noté que una chica del trabajo siempre pasaba por donde almorzábamos y solo saludaba a mi pareja. Él comenzó a cambiar drásticamente. Lo que le gustaba de mí ya no le parecía, dejó de almorzar conmigo, discutíamos constantemente en casa y en el trabajo. Además, lo veía riendo y charlando con esa chica con frecuencia. Desde el principio, sabía que las intenciones de esa chica no eran buenas.
Después de tres meses, dejé la escuela, algo que había anhelado durante mucho tiempo, pero de repente ya no quería seguir. Poco después me enteré de que estaba embarazada. En una fiesta infantil a la que asistimos, vi cómo esa chica le miraba fijamente a mi pareja. Le reclamé a mi pareja y él me aseguró que no pasaba nada. Sin embargo, cuando vi un mensaje de ella en su celular, confronté a mi pareja y él admitió la verdad. Me fui de la casa, y él lloró, algo que nunca antes había hecho.
Al día siguiente, despidieron a mi pareja del trabajo. Hablé con una compañera de trabajo que nos había invitado a la fiesta y me dijo que estaba mal por haberme ido de la casa, que mi pareja aceptaba su culpa y juraba que no había pasado nada. A pesar de sus explicaciones, me costaba creerle, ya que él pasaba la mayor parte del tiempo en casa o trabajando.
Nunca entendimos por qué esos sucesos paranormales o extraños ocurrían en el hotel donde trabajábamos. El gerente mencionó una vez que se rumoreaba que antes de que el hotel fuera construido, el terreno era un camino a la playa y un camión escolar había tenido un accidente con otro camión de materiales, resultando en la muerte de varios niños. Sin embargo, nunca pude confirmar si este accidente realmente había ocurrido.
Esto es todo lo que puedo recordar hasta ahora de ese período de mi vida.
¡Fin!
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